Una tragedia vial sacudió a la localidad de Los Hornos el domingo 23 de junio por la noche, cuando dos trabajadores cartoneros perdieron la vida tras ser embestidos por una camioneta mientras circulaban con su carro de recolección. El fatal episodio tuvo lugar en la avenida 155, entre 79 y 80, y generó una profunda conmoción entre vecinos y organizaciones sociales de la zona.
El hecho ocurrió pasadas las 21, cuando, por causas que aún son materia de investigación, una camioneta Fiat Toro impactó violentamente contra un carro que era arrastrado a pie por dos hombres que se dedicaban al reciclado urbano. Producto del violento choque, ambas víctimas sufrieron lesiones gravísimas y murieron en el lugar antes de que los equipos de emergencia del SAME pudieran asistirlos.
Una de las víctimas fue identificada como Ramón Nicolás Ojeda, de 29 años, domiciliado en la zona de 38 y 150. El segundo fallecido aún no pudo ser reconocido oficialmente, ya que su cuerpo fue hallado más tarde por personal policial y peritos de la Policía Científica, oculto entre pastizales, a pocos metros del lugar del impacto. En un primer momento, se había informado sobre un solo deceso, pero el trabajo minucioso en el lugar del siniestro permitió confirmar que se trataba de una doble tragedia.
El conductor del vehículo involucrado es un hombre de 64 años, jubilado y viudo, quien fue imputado por el delito de "doble homicidio culposo". La causa quedó en manos de la UFI N°14 del Departamento Judicial La Plata, bajo la órbita del fiscal Federico Chiarlo. Hasta el momento, no se han difundido los resultados de las pericias toxicológicas ni el test de alcoholemia.
Efectivos del Comando de Patrullas, personal de la Comisaría Tercera y agentes de Policía Científica trabajaron en la escena para recabar pruebas, tomar declaraciones y determinar con precisión las circunstancias del siniestro. Según informaron fuentes de la investigación, no se descarta ninguna hipótesis, incluyendo la posibilidad de visibilidad reducida o distracción al volante.
Este hecho reabre el debate sobre la seguridad vial en zonas periféricas y la falta de medidas de protección para los trabajadores informales que a diario circulan por las calles con carros de tracción manual, muchas veces en condiciones precarias y sin señalización.