El deterioro de la avenida 66 encendió las quejas de vecinos y conductores que transitan a diario por la zona. El asfalto presenta marcadas deformaciones que obligan a los automovilistas a maniobrar de costado para evitar que la parte inferior de los vehículos golpee contra la calzada.
La situación genera complicaciones constantes: no solo se multiplican los daños en los rodados, sino que además aumenta el riesgo de siniestros viales por las maniobras bruscas que realizan los conductores al intentar esquivar las irregularidades.
Se hace imposible manejar derecho, los autos tocan abajo y tenemos que buscar la orilla de la calle para poder pasar, expresaron los vecinos, quienes exigen una repavimentación integral y urgente.
Por el momento, la avenida continúa siendo escenario de tránsito complicado y de reclamos que crecen día a día.